Gracias por todos los momentos
que hemos compartido
momentos llenos de sentimientos
y pensamientos compartidos,
sueños y anhelos,
secretos, risas y lágrimas,
y sobre todo, el compañerismo diario.
Cada preciado segundo quedará atesorado
eternamente en mi corazón.
Gracias por dedicar tiempo
para demostrar su preocupación por los otros,
tiempo para escuchar los problemas
y ayudar a buscarles una solución,
y sobre todo,
tiempo para sonreír y demostrar sus afectos.
Gracias por ser lo que son
unas personas maravillosas.
Pude contar con ustedes
cuando necesitaba en quien confiar
y pedirles consejos.
Gracias a ustedes comencé
a conocerme
e incluso a apreciar lo que soy.
Muchas gracias por su compañerismo!!
AGOSTINA